Carlos Alcaraz, actual número tres del mundo, reconoció que la presión por superar a Jannik Sinner durante la ausencia del italiano tuvo un impacto negativo en su juego. Sinner, quien cumple una sanción por dopaje hasta el 4 de mayo, dejó vacante temporalmente el primer puesto del ranking mundial.
Muchos vieron en esa situación una oportunidad para que Alcaraz recuperara el liderato, pero el español confesó que las expectativas externas terminaron por afectarlo. Desde Montecarlo, donde comienza su temporada en tierra batida, Alcaraz admitió que esa carga mental influyó en su desempeño en la cancha.
A pesar de haber ganado su primer título de 2025 en Róterdam, el murciano no ha logrado mantener una buena racha. Cayó en cuartos de final en Doha, alcanzó las semifinales en Indian Wells y fue eliminado en las primeras rondas de Miami. Estos resultados lo han dejado a más de 3.500 puntos de Sinner, y también por detrás de Alexander Zverev.
Con la mira puesta en la defensa de su título en Roland Garros, Alcaraz busca un nuevo enfoque mental. Iniciará su participación en Montecarlo contra Fabio Fognini o Francisco Cerúndolo. El joven de 21 años señaló que ahora se enfoca en disfrutar del juego, sin obsesionarse con el ranking. “Estoy demasiado lejos de Jannik en este momento”, afirmó, destacando que su prioridad es rendir bien sin cargar con la presión de ser número uno.
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