A sus 33 años, Neah Evans, quien ayudó al equipo británico a obtener una medalla de plata en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, ha elegido saltarse el evento ceremonial para mantener su ventaja competitiva. Evans, en una entrevista con Sportshour, explicó que esta será la cuarta gran competición en la que evita la ceremonia de apertura, prefiriendo centrarse en lograr los mejores resultados posibles.
Evans explicó que, aunque muchos atletas ven los Juegos Olímpicos como el culmen de sus esfuerzos, ella siempre ha apuntado a competir por medallas y, por lo tanto, prioriza el rendimiento sobre la participación en la ceremonia. Destacó el extenso tiempo de espera y el estar de pie durante la ceremonia, lo que considera incompatible con las necesidades de un rendimiento de élite.
En lugar de asistir a la ceremonia, Evans planea usar la noche para otras actividades. Mencionó que su equipo llevará el uniforme especial para la ceremonia de apertura y podría usarlo en la cena como un gesto para conmemorar la ocasión. Esta estrategia le permite reconocer la ceremonia mientras se mantiene concentrada en sus preparativos.
Durante su estancia en el campo de entrenamiento en el Celtic Manor Resort en Gales, Evans se alojará en lujosas cabañas, lo que asegura que se mantenga en óptimas condiciones para la competencia. Su decisión subraya su compromiso con el rendimiento y su enfoque estratégico hacia las grandes competiciones.
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