Luka Mkheidze avanzó a las semifinales en la categoría de -60 kg el sábado, con el objetivo de asegurar la primera medalla de oro de Francia en los Juegos Olímpicos de París. Mkheidze, quien previamente ganó una medalla de bronce en los Juegos de Tokio, fue animado por el entusiasta apoyo de los aficionados que agitaban banderas francesas y mostraban un gran cartel de él. Venció al surcoreano Kim Won-jin y competirá a continuación contra el turco Salih Yildiz.
En la misma competición, el taiwanés Yang Yung-wei, que obtuvo una medalla de plata en Tokio, fue eliminado en una sorpresa temprana por el kazajo Yeldos Smetov, impidiéndole llegar a los cuartos de final. Smetov ahora se enfrentará al español Francisco Garrigos en la otra semifinal. Garrigos triunfó sobre el judoka japonés Ryuju Nagayama, quien permaneció en el tatami durante varios minutos después de su derrota, visiblemente molesto por la decisión del árbitro de conceder la victoria por ippon al español, lo que provocó abucheos del público.
La atmósfera en el recinto mejoró considerablemente más tarde en la mañana cuando los judokas franceses Shirine Boukli y Mkheidze aseguraron victorias significativas casi simultáneamente. La multitud, con gran entusiasmo, cantó el himno nacional francés mientras los dos atletas subían al tatami, celebrando sus logros y mostrando un fuerte apoyo a los competidores del país anfitrión.
Sin embargo, el recorrido de Boukli en la categoría de -48 kg se detuvo a manos de la triple campeona mundial japonesa Natsumi Tsunoda, quien se enfrentará a la judoka sueca de 18 años Tara Babulfath en las semifinales. Mientras tanto, la otra semifinal verá a la mongola Baasankhuu Bavuudorj competir contra la española Laura Martinez Abelenda.
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