En la inauguración del Riyadh Season World Masters of Snooker, John Higgins estuvo a punto de hacer historia al casi completar el primer puntaje de 167, lo que le habría valido £395,000.
La introducción de la nueva bola dorada añadió una dimensión intrigante al evento, permitiendo a los jugadores que completan un 147 buscar un puntaje récord de 167. La bola dorada, valorada en 20 puntos, permanece en el tope del cojín siempre que un jugador pueda lograr el puntaje máximo, siendo retirada una vez que se agota la oportunidad.
Durante la segunda ronda contra Mark Williams, el tetracampeón mundial Higgins mostró su destreza al convertir 15 bolas rojas y negras, posicionándose para el histórico puntaje.
Sin embargo, un ligero exceso en su enfoque hacia la bola amarilla le negó la oportunidad, resultando en un puntaje de 120. A pesar de esto, Higgins aseguró una victoria por 4-2 sobre Williams, preparando el escenario para un enfrentamiento en cuartos de final contra el número uno del mundo, el inglés Ronnie O'Sullivan.
El evento, que presenta a los diez mejores jugadores del mundo, incluyendo al heptacampeón mundial O'Sullivan, incorpora la regla única de la bola dorada, añadiendo complejidad estratégica a los partidos. El torneo también incluye dos wild cards locales, con el inglés Ali Carter asegurando una victoria por 4-3 contra el chino Ding Junhui en una reñida primera ronda.
Los jugadores clasificados en el noveno y décimo lugar en el mundo, Higgins y Ding, respectivamente, iniciaron su trayecto en la ronda preliminar con convincentes victorias por 4-0 sobre Omar Alajlani de Arabia Saudita y Ali Alobaidli de Qatar.
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