Zak Brown expresó su aprobación respecto a las sanciones impuestas a Max Verstappen durante el Gran Premio de la Ciudad de México, afirmando que las penalizaciones de 20 segundos eran "probablemente insuficientes". Verstappen, quien lidera el campeonato pero no ha ganado una carrera desde mayo, recibió penalizaciones por conducción agresiva, especialmente en dos incidentes con Lando Norris al inicio de la carrera.
Estos incidentes resonaron con sus controvertidas maniobras en el Gran Premio de Estados Unidos la semana anterior, donde también obligó a Norris a salir de la pista.
En una carrera que finalmente fue ganada por Carlos Sainz de Ferrari, quien será reemplazado por Lewis Hamilton la próxima temporada, Norris terminó en segundo lugar, mientras que Charles Leclerc aseguró el tercer puesto para Ferrari. Brown destacó la necesidad de una conducción más limpia y elogió las acciones decisivas de los comisarios de la FIA.
Subrayó la importancia de mantener un ambiente justo y competitivo a medida que avanza la temporada, reflejando una creciente frustración con las tácticas agresivas observadas en la pista.
Norris también compartió su perspectiva, reconociendo los desafíos que presenta el estilo de conducción de Verstappen. Indicó que, aunque respeta a Verstappen como competidor, encontró los incidentes indicativos de una conducción menos limpia.
A pesar de estos desafíos, Norris sintió que logró manejar bien la carrera, sugiriendo que estaba preparado para posibles enfrentamientos. Verstappen había comenzado la carrera desde la segunda posición en la parrilla, tomando brevemente la delantera antes de que Sainz lo superara, lo que preparó el escenario para los enfrentamientos con Norris.
Como resultado de las penalizaciones y los resultados de la carrera, la ventaja de Verstappen en el campeonato se redujo a 47 puntos. Las dificultades de Red Bull continuaron, ya que Sergio Pérez también recibió una penalización por un falso inicio y terminó en 17ª posición.
El director Christian Horner defendió las acciones de Verstappen, cuestionando la consistencia de las sanciones y enfatizando la necesidad de claridad entre los pilotos y la FIA sobre la conducta de carrera aceptable. A pesar de los contratiempos, Verstappen se mostró tranquilo respecto a su ventaja en el campeonato, expresando confianza en el potencial de su equipo para recuperarse en las próximas carreras.
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