Max Verstappen llega al Gran Premio de Italia bajo una presión creciente sobre su dominio en la Fórmula 1, con su cuarto título consecutivo luciendo menos seguro que antes del descanso de verano. El neerlandés no ha ganado una carrera desde el Gran Premio de España en junio, lo que marca una racha de cinco carreras sin victoria, frenando significativamente su impulso y la anteriormente inquebrantable posición de Red Bull en el deporte. La incapacidad de Verstappen para asegurar la victoria en su GP de casa por primera vez en cuatro años, el pasado fin de semana, subrayó aún más su pérdida de control sobre el campeonato de pilotos.
Durante la carrera en Zandvoort, Verstappen terminó más de 23 segundos detrás de Lando Norris, destacando problemas con su coche que surgieron durante una frustrante sesión de clasificación. La superioridad de McLaren ese día obligó a Verstappen a aceptar una derrota humillante después de ser superado en la vuelta 18, y más tarde admitió que se centró en asegurar el segundo lugar en lugar de arriesgarse a cometer más errores. A pesar de las dificultades recientes, Verstappen se mantiene tranquilo, subrayando que no hay necesidad de pánico ya que aún lidera el campeonato por 70 puntos.
Las recientes mejoras de McLaren representan una seria amenaza en Monza, un circuito donde Verstappen ha dominado en los últimos dos años, especialmente frente a Ferrari en su territorio. Sin embargo, su rival más cercano, Norris, desestimó como "estúpida" la idea de superar a Verstappen en la lucha por el título, dado que el campeón reinante ha asegurado consistentemente posiciones en el podio en 10 de las 15 carreras de esta temporada, incluyendo siete victorias. Aunque la invencibilidad de Verstappen ha disminuido, su habilidad y conducción estratégica lo han mantenido en la contienda, como señaló el jefe del equipo Red Bull, Christian Horner, quien destacó la importancia de sumar puntos, incluso cuando la victoria no es posible.
Mientras tanto, Ferrari, actualmente tercero en el campeonato de constructores y con 64 puntos de desventaja respecto a Red Bull, busca superar las recientes decepciones en Monza y aprovechar su mejor forma. El reciente podio de Charles Leclerc en Zandvoort y la lucha de Carlos Sainz para alcanzar la quinta posición han elevado la moral del equipo antes de su Gran Premio en casa. El ex piloto de Ferrari, Fernando Alonso, incluso predijo que Ferrari sería el equipo a vencer en Monza y en el próximo GP de Azerbaiyán, citando su fuerte posición en la lucha por el campeonato y su potencial para desafiar a McLaren, Red Bull y Mercedes por posiciones en el podio.
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