A pesar de las dificultades continuas de Ferrari para igualar el ritmo de McLaren, Charles Leclerc se mantiene optimista acerca de las próximas carreras en Azerbaiyán y Singapur tras su victoria en el Gran Premio de Italia. Leclerc consiguió el triunfo en Monza con una estrategia de una sola parada para cambiar neumáticos, superando a los pilotos de McLaren, Oscar Piastri y Lando Norris, quienes hicieron dos paradas durante la carrera. Esta victoria fue la primera para Ferrari desde el triunfo de Leclerc en Mónaco en mayo y el tercer triunfo de la temporada para el equipo.
El éxito de Ferrari en Monza permitió al equipo acumular la mayor cantidad de puntos, totalizando 37, en comparación con 34 de McLaren y 16 de Mercedes. Esta actuación redujo la diferencia de puntos de Ferrari a 39 detrás de los líderes actuales, Red Bull, que tienen una ventaja estrecha de ocho puntos sobre McLaren. La victoria de Leclerc ha infundido un renovado optimismo en la temporada de Ferrari, aunque él reconoce que McLaren sigue siendo el equipo a batir.
Leclerc expresó confianza para el próximo Gran Premio de Azerbaiyán, señalando que el circuito de Bakú históricamente se adapta a su estilo de conducción y podría ofrecer otra oportunidad para que Ferrari muestre su competitividad. Reflejó de manera positiva sobre las recientes mejoras de Ferrari, incluyendo un nuevo alerón introducido en Monza, que ayudó a reducir la brecha de rendimiento, aunque reconoció que el equipo aún está detrás de McLaren y Red Bull en términos de ritmo general.
Aunque Leclerc elogió el progreso de Ferrari, moderó las expectativas sobre la capacidad del equipo para desafiar consistentemente por victorias durante el resto de la temporada. Destacó que, a pesar de las mejoras, Ferrari aún podría quedar corto frente a los equipos líderes en diferentes circuitos. Sin embargo, los resultados de Monza demostraron que Ferrari puede competir de cerca con McLaren, señalando un paso en la dirección correcta para el equipo.
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