El incidente ocurrió después de la derrota de Wolverhampton por 2-1 contra Ipswich Town en la Premier League el 14 de diciembre, en el estadio Molineux. Cunha habría tenido un enfrentamiento con el personal de seguridad de Ipswich, supuestamente golpeando a uno con el codo y retirándole las gafas por la fuerza.
La confrontación ocurrió tras la derrota del Wolverhampton frente a un rival directo en la lucha por el descenso, un partido marcado por la tarjeta roja de Rayan Aït-Nouri y el gol de Jack Taylor en el tiempo añadido para Ipswich.
La Asociación de Fútbol (FA) acusó a Cunha por sus acciones, y el delantero brasileño admitió las acusaciones. Como resultado, una comisión independiente le impuso una suspensión de dos partidos junto con una multa de 80.000 libras (aproximadamente 100.000 dólares).
La FA declaró que las razones detalladas para la sanción se darán a conocer más adelante. La suspensión de Cunha significa que se perderá el próximo partido del Wolverhampton en la Premier League contra el Nottingham Forest el lunes, así como su enfrentamiento de la tercera ronda de la FA Cup contra el Bristol City.
La ausencia de Cunha supone un gran golpe para el Wolverhampton, ya que el delantero de 25 años ha sido el mejor jugador del equipo esta temporada, con 10 goles en 19 partidos de liga. Wolverhampton actualmente está una posición y un punto por encima de la zona de descenso.
La derrota ante Ipswich también provocó cambios en el cuerpo técnico, con el despido de Gary O'Neil y la contratación del entrenador portugués Vítor Pereira.
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