El incidente ocurrió tras la victoria del equipo femenino de España en la Copa del Mundo en agosto de 2023, cuando Rubiales besó a Hermoso en los labios sin su consentimiento mientras celebraban el triunfo.
Desde entonces, Hermoso se ha convertido en un símbolo de la lucha contra el sexismo en el deporte, generando una reflexión generalizada tanto en España como internacionalmente.
Los fiscales piden una condena de dos años y medio de prisión para Rubiales, un año por el cargo de agresión sexual relacionado con el beso y 18 meses adicionales por presuntamente haber presionado a Hermoso para que minimizara el incidente.
Rubiales enfrentará el juicio junto al ex entrenador nacional Jorge Vilda y dos ex funcionarios de la federación, Ruben Rivera y Albert Luque, todos acusados de intentar coaccionar a Hermoso para encubrir el escándalo. El juicio, que se espera dure hasta el 19 de febrero, se lleva a cabo en un tribunal a las afueras de Madrid.
La controversia comenzó cuando Rubiales besó a Hermoso durante la ceremonia de medallas después de la victoria de España ante Inglaterra en la final de la Copa del Mundo. Sus acciones fueron condenadas como un abuso de poder, especialmente después de que él intentó restar importancia al incidente, calificándolo como un "gesto amistoso".
A pesar de la fuerte reacción, incluida la de Hermoso, quien describió el acto como una "violación machista", Rubiales se negó inicialmente a dimitir, atacando al "feminismo falso". Sin embargo, finalmente renunció en septiembre de 2023 tras el inicio de la investigación.
ADD A COMMENT :