Tsurenko, de 35 años, acusa a la WTA de someterla a un "abuso moral", asegurando que sufrió un importante deterioro psicológico, incluyendo ataques de pánico, después de que la organización presuntamente encubriera a un alto funcionario que, según ella, la habría acosado de manera intencionada. Según explicó, sus intentos de resolver el problema de forma interna fueron ignorados, lo que contribuyó a lo que describió como una "decadencia moral prolongada".
La situación, afirma Tsurenko, escaló hasta incluir angustia emocional, falta de transparencia y acoso hacia su equipo de apoyo, con el fin de silenciarla. Ante esto, señaló que su último recurso es acudir al sistema legal para defender su dignidad y sus derechos.
La ucraniana, que ha expresado en varias ocasiones su preocupación por la guerra en su país y cómo ha afectado su carrera, criticó a la WTA por no brindarle el apoyo necesario durante ese tiempo. Actualmente clasificada en el puesto 239 del ranking mundial, Tsurenko se retiró de un partido en 2023 tras sufrir un ataque de pánico después de una conversación con representantes de la WTA sobre la guerra en Ucrania.
Describió a la WTA como un "lugar aterrador y ajeno", condenando la decisión de la organización de respaldar a una figura de poder en lugar de protegerla como jugadora. Con gran decepción, expresó su deseo de que ningún otro atleta tenga que pasar por una situación similar y pidió rendición de cuentas en el deporte.
ADD A COMMENT :