El fútbol turco se vio envuelto en otra polémica después de que el Fenerbahçe SK criticara abiertamente a su archirrival, el Galatasaray, tras los caóticos sucesos en el partido de este último contra el Adana Demirspor.
El partido tomó un giro inesperado cuando el Adana Demirspor, que perdía 1-0, dejó repentinamente el campo en señal de protesta. Esto ocurrió a los 30 minutos, después de una decisión de penalti a favor del Galatasaray, lo que generó frustración en el equipo visitante.
La controversia comenzó en el minuto 12, cuando el árbitro señaló un penalti para el Galatasaray después de que Dries Mertens cayera en el área. Los jugadores del Adana Demirspor alegaron que Mertens se había tirado y se opusieron firmemente a la decisión. Sin embargo, la revisión del VAR confirmó la decisión, y Álvaro Morata convirtió con éxito el penalti.
Cuando el juego se detuvo momentáneamente debido a una lesión de Barasi, el equipo del Adana Demirspor, bajo la dirección del entrenador Mustafa Alper Avcı, tomó la audaz decisión de abandonar el campo en protesta. Su salida fue recibida con silbidos y abucheos del público local, y poco después, los árbitros también abandonaron el campo. Diez minutos después, el partido fue oficialmente suspendido, con los jugadores del Galatasaray saludando a sus aficionados antes de retirarse al túnel.
En respuesta al incidente, el Fenerbahçe intensificó la rivalidad respondiendo a una publicación del Galatasaray en las redes sociales con una declaración contundente. El club acusó al Galatasaray de prácticas poco éticas, como la manipulación de contratos, la venta ilegal de entradas y el comportamiento engañoso en el fútbol.
La declaración decía: "Con sus contratos ilegales, ventas ilícitas de entradas y promociones de apuestas no autorizadas, están dañando a nuestra nación y a la Federación Turca de Fútbol. Sus narrativas manipuladas por los medios y comentarios insinceros están engañando al público. ¡Sigan engañando a los árbitros y a los aficionados al fútbol con sus jugadores, que durante años han practicado simulación! ¡Gracias a ustedes, ya no existe confianza ni justicia en el fútbol! ¡Sin embargo, siempre se hacen las víctimas! Felicitaciones, ¡miren lo que han hecho al fútbol turco!"
Este reciente intercambio de declaraciones intensifica aún más la rivalidad entre los dos clubes más grandes de Turquía, que están luchando por el título. Durante el partido entre el Galatasaray y el Adana Demirspor, el delantero de las Super Águilas, Victor Osimhen, fue visto animando a los aficionados locales con un famoso cántico del Galatasaray, una tradición característica entre los fervientes seguidores del club.
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