Con apenas 17 años, Gout sigue causando sensación por su increíble velocidad, despertando comparaciones con la leyenda del sprint Usain Bolt. Aunque el viento a favor superó el límite legal y anuló el tiempo como récord oficial, la marca habría sido la segunda más rápida de la historia en la categoría sub-20. A pesar de su frustración por las condiciones climáticas, la actuación dejó clara su enorme proyección.
Gout mostró una gran compostura en una carrera tensa marcada por dos salidas en falso, una de las cuales provocó la descalificación de su principal rival. Sin perder la concentración, se impuso con autoridad en la final y se llevó el oro. No es la primera vez que corre por debajo de los 20 segundos en los 200 metros o de los 10 segundos en los 100, aunque todos sus registros anteriores también fueron con viento a favor.
La historia de Gout está llena de determinación. Nacido en Australia, es hijo de padres sursudaneses que huyeron de la guerra civil. Lleva el nombre de su padre y creció junto a seis hermanos. Su herencia Dinka —una etnia reconocida por su fortaleza física— contribuye a su imponente físico, que recuerda al de Bolt. Aunque inicialmente se inclinó por el fútbol y el rugby por su admiración por Cristiano Ronaldo, fue su profesora Diane Shepard quien lo introdujo al atletismo en séptimo grado y que sigue siendo su entrenadora hasta hoy.
Su ascenso en el deporte ha sido meteórico. A los 14 años ya rompía récords nacionales juveniles en los 100 metros y, a los 15, en los 200. Su gran irrupción llegó en diciembre de 2024 en los Campeonatos Escolares Australianos, donde corrió los 100 m en 10.17 (con viento a favor) y los 200 m en 20.04 con viento legal, superando un récord nacional absoluto que tenía 56 años, previamente en manos de Peter Norman.
Ese logro confirmó que Gout Gout no es solo una promesa juvenil, sino un atleta récord con el potencial de dejar huella en el escenario internacional.
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